martes, 25 de diciembre de 2007

Hablar por hablar.

¿Quien no desea reducir todo a conceptos, factorizar, simplificar, olvidarse? Pero entre trago y trago, cuando se impone la pausa de duracion relativa, llegan las visiones de cordura y sal, envueltos en el velo de Maya, ahora completamente sucio y nada traslucido. Como todo lo tocado por el hombre, tambien termina pudriendose o cambia de nombre y forma hasta disolverse completamente (errores de sintaxis hay en todas partes). Terminemos la sentencia mientras se derrite el hielo y se funde con el alcohol, invitacion forzada que aceptamos voluntariamente; y cuando miras dentro del abismo, este tambien mira dentro de ti, la unica diferencia es que en el abismo de este vaso lleno puedo ver mi reflejo y mis ojos en sus orbitas como siempre.

(((Lo que vino de adentro, lo que ha venido de afuera,
no puedo ser yo, y dudo de mí mismo desde ese dia))).  <<<< PLAGIO.